Ahorrar e invertir tienen diferentes objetivos y aunque se complementan entre sí, cumplen papeles distintos dentro de nuestra planificación financiera que dependen de tus metas financieras a corto, mediano y largo plazo.
Ahorrar = Guardar
Ahorrar es guardar una parte de nuestro dinero para usarlo en cualquier momento.
La cultura o hábito de ahorro es un básico que debemos de aprender de pequeños que nos ayudará a darle valor al dinero y cumplir alguna metas personales y financieras.
Ahorrar es importante para metas a corto plazo y propicia a la construcción de un fondo de emergencia y fondos de gastos programados tales como: la planificación de un viaje, el pago inicial en la compra de algún activo, reparaciones y/o mantenimientos grandes.
Invertir = Aumentar
Invertir es buscar incrementar el valor del dinero que tenemos ahorrado.
Invertir consiste en la compra de bienes físicos, intelectuales o financieros para obtener beneficios futuros. Tiene como objetivo obtener una suma superior al monto de capital inicial.
Para invertir debes de tener muy claro, cuánto tienes disponible para invertir, tus metas de inversión, plazos de tiempo y el riesgo que estás dispuesto a asumir. Invertir también contribuye a nuestras metas de mediano o largo plazo. Ideas como un fondo universitario o para el estudio de nuestros hijos, un fondo para la jubilación o crear una fuente de ingreso adicional, son algunas de las metas que logramos a través de la inversión.
La importancia que tengan el ahorro o la inversión para tu bolsillo dependerá de tus necesidades y etapa de vida financiera en la que estés.